Acompáñame en esta reflexión tan personal que hago, al echar la vista atrás para darme cuenta que ahora todo lo que me suma empieza por restar cosas.

El color refleja tu estado de ánimo. Si tienes en cuenta esto a la hora de vestir podrás cambiar la ecuación al revés. ¿Te animas?

Superar el pánico escénico es posible con herramientas

El pánico escénico es un miedo irracional que secuestra tu corteza prefontal y no te deja pensar, razonar, decidir o hablar de manera objetiva.

Tu cuerpo puede tener una respuesta fisiológica como ponerte a sudar, palpitaciones...

¿Pero qué pasa cuando el pánico escénico ocurre en el silencio de tu casa o tu oficina? 

En el capítulo de hoy hablaré de lo que suele ocurrir cuando el pánico escénico no se da frente a un montón de personas sino en la intimidad de tu casa o tu oficina.

Y esto lo que hace es generar una parálisis total o parcial a la hora de generar el contenido que se puede extender en el tiempo y hacer que postpongas una y otra vez lo que sabes que tienes que hacer (que es bueno para tu negocio) y que te niegas a hacer por esta reacción a una situación que te genera pánico escénico.

Seguro que ahora mismo, si te cuestar superar el pánico escénico estarás pensando que es prácticamente imposible que superes ese miedo y esas situaciones concretas.

Enfrentarlas es difícil y complicadado. Pero lo vamos a ver como un reto. Por alguna razón la vida y tus emociones te han puesto ahí. 

Tienes dos opciones para superar el pánico escénico. La primera es evitarlo a toda costa y no superar esa sensación. Y la segunda (y más recomendada) es enfrentar ese miedo y descubrir que detrás de él ya no hay nada.

En situaciones que causan incomodidad, lo mejor es ir directo a ellas. Porque de lo contrario están ahí como una sombra. Como tu némesis particular. Es como una nube que sabes que "cerrando los ojos" a esa situación parece que desaparece pero en el fondo sigue ahí.

Para superar el pánico escénico hay que pensar en el origen. ¿Cuándo fue la primera vez que me ocurrió? ¿Cómo reaccione? ¿Cómo he estado huyendo de esta situación de manera continuada y por qué?

Para superar el pánico escénico hay que encontrar herramientas. Hoy en día es fácil encontrar a personas o sistemas que te puedan guiar y ayudar a dar pasos para encontrar la solución a esta situación. No es un problema, no es nada malo. No tienes que dejar que te limite. Puedes hacer lo que quieras, puedes llegar donde quieras. 

Pensar en cada momento en el que sucede el pánico escénico, herramientas para ir superándolo poco a poco.

Cuando tomas una decisión de mejora en tu vida, todo cambia como por arte de mágia. Sólo tienes que pensar que a partir de ahora utilizarás herramientas que te den la posibilidad de superar ese miedo y dejarlo atrás. Así no tendrás que preocuparte nunca más por él.

 ►Cap.100 Superar el pánico escénico

Busca el cambio en ti. Adáptalo a tu rutina a tu día a día. Esfuérzate un poco y tras cada esfuerzo programa una recompensa. Así estarás en el camino, paso a paso de superar el pánico escénico. 

Si tu objetivo es crear contenido en vídeo. Y te sientes paralizada cuando tienes que grabar, procrastinas continuamente el hacerlo, piensa seriamente en esto que te digo.

NADIE HARÁ LAS COSAS POR TI. Nadie va a venir a decirte cómo superar las cosas y llegar a una versión mejor de ti. Tienes que ser tu misma. Quien te salvará del dragón en lo alto del castillo no es el príncipe azul sino tu misma. 

Remángate, escribe en un papel todas aquellas cosas que te producen esa sensación. Identifícalas. Que sean objetivas. Y después ponte sobre ello a trabajar.

Y cuado veas que no puedes más, realiza respiraciones profundas. Te dejo aquí una MEDITACIÓN GUIADA que probablemente te ayude. La respiración te trae siempre al momento presente que es en el que tienes que estar centrada siempre.

Disfruta de tu vida, de tu trabajo e inspira a otras personas creando contenido que ayude.

Si quieres seguir mi día a día, puedes hacerlo desde mi cuenta de  IG.

Me hará muy feliz saber que te he podido ayudar con este vídeo. 

Con cariño,

Amalia